Sigamos el camino de
baldosas electrónicas para en esta ocasión estacionarnos en el universo de María José González, que con el pseudónimo de Ani Zinc protagonizó una de las
mejores páginas del movimiento electrónico en tierras ibéricas. Salvando
las distancias, y sin caer en la locura, podríamos afirmar sin pudor que
Ani Zinc, a través de su participación en Diseño Corbusier y su proyecto paralelo Neo Zelanda, ha
sido y es nuestra Cosey Fanni Tutti. Y
debemos gritarlo con orgullo.
Sin obligaciones con
nadie, excepto con sus principios y gustos sonoros, Diseño Corbusier (D. C.) emprendió una carrera al
margen de la industria musical establecida. Sus canciones se difundieron y
obtuvieron más respeto fuera de nuestras fronteras. Tampoco sonaban
en los medios de masas populares, a excepción de algún reportaje en programas
minoritarios como Metropolis (TVE). Consideraban lo que hacían no
como una mercancía más para consumir, ni como un medio para alcanzar una
popularidad (entendida como sinónimo de éxito) sino como arte. La perseverancia
fue una de sus virtudes llegando a crear un sello discográfico propio. D.C.
eran de los que no se dejaban dominar. Sus ideas eran indestructibles y
no fueron moldeados por nadie.
Ahora son aceptados
por el revisionismo periodístico, pero lo
triste es que haya tenido que pasar más de 20 años para que se les
reconozcan como visionarios y talentosos. Como decía el refrán, “nunca es
tarde…”Incoformistas por no repetir viejas
fórmulas, nunca fueron serviles, y tenían el control de lo
que hacían. Voy a utilizar unas palabras del crítico musical Everett
True, D.C. “no eran puro
trámite estético, prometían hacerte la vida mejor“. A mi juicio, lo
consiguieron.
He aprovechado la
ocasión de la afortunada reedición del segundo trabajo de Diseño Corbusier (D.C.), titulado “El alma de la estrella“, para realizar unas
preguntas a Maria José (Ani Zinc) sobre su carrera musical y este disco de
culto que el sello Munster (que
ya no se dedica solamente a bucear en los sonidos más salvajes del
rock) nos facilita a muchos poder acceder a estas grabaciones
injustamente olvidadas. Solo se puede conseguir en vinilo,
siendo una edición limitada y numerada de solo 500 copias.
Diseño Corbusier, fue uno de los más ilustres proyectos de la escena industrial y experimental de la
música española, y también de los pocos grupos capaces de codearse con otras
luminarias de la música electrónica de los ochenta a nivel internacional. Si no
me equivoco, ellos empezaron a jugar con máquinas y cintas de cassette en 1982.
Para verificar la importancia de sus propuestas musicales, acudan al
recopilatorio coordinado por Trevor Jackson (Playgroup) para el sello Strut
Records, llamado “Metal Dance”. El
único grupo nacional incluido ahí ha sido Diseño Corbusier, una buena noticia teniendo en cuenta
que las bandas en ese doble cd (también disponible en vinilo) son históricas en
esto de la vanguardia electrónica, el EBM y
el post-punk de corte sintético.
Vamos a conocer,
descubrir o refrescar nuestra información sobre la historia de uno de los grupos
de culto de la escena ibérica, gracias a la entrevista a Ani Zinc. Y gracias a Munster ahora
no hace falta gastar nóminas íntegras para adquirir una de sus grabaciones,
concretamente su segundo disco “El alma
de la estrella”.
Pregunta: ¿La propuesta e intencionalidad de Diseño Corbusier
(D.C.)?
R: D.C. era el grupo que formamos Javier G. Marín y María José González (alias Ani Zinc, y Neo Zelanda)
en Granada desde principios de los años ochenta. Surgió de la fascinación por
la música de vanguardia, electrónica y experimental que nos llegaba por
diferentes medios (Radio 3, Radio Popular de Granada, revistas como Vibraciones
o Star) y que nos dieron a conocer grupos como Throbbing Gristle, Flying Lizard, The
Residents o Esplendor Geométrico. Grupos que nos
inspiraron para seguir un camino alejado de la clásica composición de grupo
(guitarra, batería y bajo) y dejarnos seducir por las voces y ritmos
pregrabados (caja de ritmos, cassettes). Era un sacrilegio total para aquellos
tiempos de rock ´n ´roll. Para nosotros era fundamental la presencia de
sonidos repetitivos, ruidos, voces distorsionadas, una base rítmica, y una
buena dosis de sentido del humor.
Pregunta: ¿Cuáles eran vuestras influencias? Aparte de Comando Bruno
¿Había algo similar en Andalucía? ¿Qué relación teníais con otros grupos
nacionales?
R: Aparte de los grupos antes citados, nos
gustaban bandas como Kraftwerk, Cabaret Voltaire,
DAF, Portion Control, SPK, 23 Skidoo, etc. Para mí, con mi
propio proyecto Neo Zelanda,
fue fundamental la música de Laurie Anderson,
Diamanda Galas, Chris & Cosey, y en España, Llorenç Barber,
del cual tuve la fortuna de escuchar una composición en la radio, quedando tan
prendada de la voz y el silabeo repetitivo de la cantante, que desde entonces
quise hacer algo parecido, salvando las distancias, claro.
El ambiente musical en
Andalucía no me parecía muy diferente al del resto de España. En los ochenta
había un ambiente general de cambio, de ganas de hacer cosas, una sensación de
efervescencia. En Granada surgieron muchos
grupos que tenían facilidad para grabar una maqueta, pero después no había nada
más. Seguíamos lejos de la industria discográfica y salas de conciertos, aunque
esas maquetas podían oírse en la radio y podían participar en concursos, pero
pocos grupos llegaban a grabar un disco.
En nuestro caso fue
más difícil todavía, porque no encajábamos en los esquemas de grupo tecno-pop
que era lo que buscaban las discográficas. Así que había que buscar por otro
sitio. Contactamos con sellos independientes como DRO. En el sello de Servando
(Aviador Dro)
editamos el single de Neo Zelanda “Paso hambre”. Sobre el sello 3 Cipreses
hay una historia peculiar. A Gabinete Caligari les pedimos por correo su primer disco y …
¡sorpresa!, vinieron ellos en persona a traérnoslo. También teníamos contacto
con otros grupos: Esplendor Geométrico,
La caída de la casa Usher, Interacción, Mar otra vez; con fanzines
como ADN, Mental, y muchos que ahora no recuerdo. También con sellos como
Necronomicón, Ortega y Cassette.
Rafael Flores (Comando Bruno) y yo éramos del
mismo pueblo (Andújar). Él me presentó a Javier, y los tres empezamos a
realizar nuestros primeros pinitos, las primeras maquetas con el nombre de
Diseño Corbusier. Redactamos un fanzine llamado Euro, dentro de la
agrupación Laboratorios No. Después de un corto período de colaboración, los
grupos D.C. y Neo Zelanda formamos nuestro propio sello Auxilio de Cientos, y Rafael continuó
trabajando bajo diferentes nombres desde Andújar.
Pregunta: Sobre la historia de Diseño Corbusier, ¿puedes aportarnos
información sobre vuestra discografía, directos, etc? ¿A qué te dedicas
actualmente?
R: A finales de 1981 Javier G. Marín puso un
anuncio en un periódico buscando interesados en formar un grupo.Rafael Flores contestó a ese anuncio porque le pareció que
los grupos en él citados eran de su agrado (Throbbing Gristle, Flying Lizard).
Así comenzaron los primeros ensayos de Diseño Corbusier además de la edición
del fanzine antes citado. Después me agregué yo y puse la voz en algunos temas
(“Pudor rojo”), y al mismo tiempo yo sola experimentaba por otros caminos (Neo
Zelanda). Estaba interesada en la utilización de la voz sin instrumentos, la
poesía fonética, el collage y el ruido puro. Así, manipulando una vieja radio y
cintas de cassette, surgió “Radio Sabotage“. Era una cinta C-60 que incluía “Paso hambre”. En junio del 82
enviamos una maqueta recopilatoria de los grupos al programa “Esto no es Hawai” de
Radio 3, y en septiembre “Paso hambre” de Neo Zelanda y “La esperanza
está en Atenas” de D.C, obtuvieron ¡400! votos en la elección de la canción del
verano. Ahí ya empezamos a ser un poco conocidos. En octubre de ese mismo año
formamos Auxilio de Cientos, abandonando la agrupación Laboratorios No, que
continuó con Rafael Flores.
En mayo de 1983 se
editó el primer single de N.Z. en sello Dro, que incluía los temas “Paso hambre” y “Francés básico”
con portada de Javier G. Marín. También se grabó un single de D. C. que no
llegó a editarse. Dos meses después, ya bajo nuestro sello, publicamos y
distribuimos la primera cassette de Diseño Corbusier “Stadia” y la segunda de
Neo Zelanda “Extenso mundo brillante”. Nuestro primer concierto se produjo en
marzo del 84, en la I Muestra de Pop-Rock
y otros Rollos de Zaragoza. Por esa época participamos también en la Semana de la Imagen y la Música Actual, en el
Palacio de los Cordova, en Granada, junto a Gabinete Caligari, 23 Skidoo, La Caida de la casa User,
Interacción, y Konstructivists. Existía una grabación en cinta de ese concierto
que estaba en muy mal estado, y que un amigo, Jorge Javier Soler, ha logrado
recuperar y restaurar. Un año después editamos 500 copias
del primer lp de D.C. “Pérfido encanto“,
y una compilación internacional de bandas formadas por una pareja. Se tituló “Pas de deux“, con grupos como Bene Gesserit, Algebra Suicide, Viscera, y otros tantos.
Publicamos también el lp recopilatorio “Terra incognita I” con inéditos de
grupos como Zazou, Nodland, Lema, DDAA, Ptose, Twilight Ritual, etc. Por
último, ya en 1986 se publicaron los vinilos de Twilight Ritual “Rituals”, el
recopilatorio feminista “Femirama”, “Mix Zelanea” de Neo Zelanda, la segunda
parte de “Terra incognita”, “The Story of Nipper” de Luto (grupo de Sevilla) y nuestro recientemente
reeditado segundo disco “El alma de la estrella“.
A partir de ese año,
el grupo se disolvió. Yo terminé psicología y encontré trabajo. Javier se
marchó a vivir a Madrid, y ninguno nos dedicamos actualmente a grabar música.
Yo trabajo en un centro de discapacidad, y aunque sigo escribiendo, pintando y
haciendo otros trabajos creativos, no he publicado nada. Lo hago solamente para
canalizar mi “hiperactividad”.
Pregunta: ¿Participasteis en el mundo del Art Mail?
R: Este intercambio de correspondencia artística
internacional (que tanto se parece al intercambio de archivos por internet)
proporcionaba una manera rápida y barata de conocer grupos e intercambiar y
vender cassettes, aunqeu fueran de 500 copias. Todos acudíamos a la revista de
referencia: la canadiense CLEM (Contact List of Electronic Music) o la belga Cassette Gazette. Nosotros
participamos en la revista de arte italiana Area Condizionata con una cassette y un pequeño collage. También
nos servimos del mail-art para organizar un concurso internacional de diseño
del logotipo de nuestro sello.
Pregunta: ¿Auxilio de Cientos como plataforma para dar a conocer a
otros grupos?
R: Ante las dudas que nos planteaba DRO para
distribuir el disco de Diseño Corbusier, que ya estaba grabado, decidimos que
lo mejor era hacerlo nosotros mismos y comenzamos la distribución internacional
de cassettes y discos de música experimental y electrónica contemporánea.
Empezamos distribuyendo en España la cassette de Graf Haufen Tapes “Some Waves”
con 23 grupos entre los que destacaban Taynna Witisa,
Esplendor Geométrico, The Actor, non Toxique Lost, etc. Junto a
nuestros grupos, también distribuíamos a gente como Pseudo Code, Maurizio
Bianchi, Synthetisches Misch, y recopilatorios como Contactdisc, Katacombe, y
un largo etc.
Pregunta: ¿Puedes
contarnos la historia de la reedición de vuestro segundo disco y la
inclusión de una canción en el recopilatorio de Trevor Jackson?
R: Todo ha ido muy rápido. Por una parte, el dj Angel Molina contactó conmigo a través de otro dj de
Granada amigo mío (Sergio Cáceres), y me comunicó el interés de Trevor en
editar un recopilatorio de la música industrial desde 1980 hasta 1988, “Metal Dance“,
en su sello Strut, y que nuestro tema “Golpe de Amistad” podría ser uno de los
que formara parte del recopilatorio, junto a grupos como Cabaret Voltaire, Yello, Nitzer Ebb, DAF, SPK… Javier hizo todos
los trámites con el sello inglés y el disco salió a primeros de 2012.
Paralelamente también aquí en España, Munster editó otra recopilación “Tensión: Spanish Experimental Underground” junto a
grupos comoLa Fundación, 429 Engaños, etc. Por último,
este mismo sello acaba de reeditar nuestro segundo disco de Diseño Corbusier “El alma de la
estrella” en vinilo y con una tirada limitada de solo 500
copias.
Pregunta: ¿Estás interesada en volver a grabar o colaborar con
músicos actuales? ¿Existe la posibilidad de retomar D.C.?
R: No sé… todo está pasando a una velocidad
increíble. Hace dos o tres años yo era ajena a todo esto. Estaba desconectada
del mundo de la música, y entonces leí comentarios en internet ensalzando
nuestro trabajo, compartían grabaciones que ni yo tenía… Hay mucha gente que se
ha puesto en contacto conmigo y con Javier con proyectos interesantes, así que
no descarto nada. Pienso que sigue siendo una música actual, aunque
minoritaria, pero ahora la minoría es más global. Me parece que la gente está
cansada del sonido de máquinas cada vez más inteligentes que componen solas, y
además, el sonido es siempre igual. Creo que vuelve el espíritu de “háztelo tú mismo” mezclando tecnología
actual con sonidos naturales, voces simples, ruido, lo analógico en general, el
vinilo, etc. Y claro, los jóvenes quieren conocer las fuentes, el origen de
todo esto. Sobre nuestro catálogo, puede que se reedite
también nuestro primer disco como D.C.
Pregunta: ¿Qué conoces de la música actual?
R: Creo que el concepto música experimental no es
el mismo, pues los recursos tecnológicos ahora son muy diferentes. Me resulta
interesante lo que hacen Matthew Herbert, Cocorosie, Aphex Twin,
James Blake, Animal Collective… De estos últimos me gustan mucho sus
vídeos. Siempre he escuchado música muy variada, según el momento. Ahora estoy
escuchando a The XX, Damien Jurado,
Maika Makowski, que son todos estilos muy diferentes.
Pregunta: ¿Quieres añadir algo más o trasladar algo a nuestros
lectores?
R: Simplemente decir que me siento muy halagada y
agradezco todas las muestras de aprecio que he recibido en estos últimos meses.
Publicado por Sergio Sánchez en el blog de Fnac.es. 2013.